La comunicación corporativa es un nicho en constante movimiento y evolución. Lo que ayer valía puede no hacerlo hoy y, por supuesto, es bastante probable que mañana no lo haga. En esta industria, el estudio a las tendencias y la adaptación al mercado son aspectos críticos a la hora de lanzar con éxito acciones y campañas comunicativas. Por eso, con el curso 2023 recién estrenado, repasamos cinco mandamientos de comunicación corporativa que marcarán la pauta durante los próximos 12 meses.
Tras años gestionando las relaciones con los medios de empresas de referencia en su ámbito local o sectorial, ejerciendo como su gabinete de prensa y estando a cargo de la producción, difusión de comunicados, negociación de temas informativos y gestión de la reputación en los medios tenemos clara una cosa: no hay dos acciones idénticas. Cada empresa es diferente, cada producto a comunicar es distinto, debemos adaptarnos al contexto geográfico, a la actualidad y a las distintas sensibilidades. En definitiva, un puzzle con muchas piezas que hay que encajar cada vez que nos ponemos a trabajar, y que estaremos más cerca de resolver si sabemos poner el foco en las cuestiones importantes.
En comunicación corporativa, los valores lo son todo
Las acciones de comunicación corporativa tratan de difundir la información sobre un hecho concreto. Pero hay que tener en cuenta una cosa: los sucesos, por importantes que sean, acaban quedando atrás en el tiempo. Los valores no. Es crucial identificar tus valores como empresa, saber plasmarlos para que el público se identifique con ellos y hacer que empapen cada paso que damos, tanto a nivel interno como a nivel comunicativo. Ninguna novedad puede lograr una conexión emocional si los valores no están en la ecuación.
Personas antes que marcas
Lo habrás visto miles de veces: una empresa publica un post en RRSS y su alcance es limitado. La persona a cargo de esa misma empresa publica lo mismo y las interacciones son infinitamente superiores. Cada una de las personas que forma parte del equipo debe ser embajadora de lo que se hace. Ninguna marca, por potente que sea, tiene la credibilidad y recorrido que alcanza una cara con nombre y apellidos. Haz de tu equipo parte de tu estrategia de comunicación y los resultados serán superiores.
Tecnología sí, pero… ¿Para qué?
Metaverso, blockchain, DeFi, inteligencia artificial… Todos esos conceptos forman parte de la actualidad, y parece que no hablar de ello es quedarse fuera de algo. Pero no tiene por qué. La tecnología es fantástica, pero plantéate qué papel juega en tu empresa y si realmente aporta algo a tu comunicación. Meterla con calzador en cualquier ocasión es una mala idea: tu público no entenderá de qué le hablas y tu propia marca se verá erosionada
Multicanal, sí; intentar abarcar todo, no
Ningún canal de comunicación es tan potente como la suma de todos juntos. Eso no quiere decir que debas estar en todas partes, pero sí quiere decir que no puedes poner todos los huevos en una misma cesta. Por tu actividad empresarial, perfil de público o industria es casi seguro que algún canal te convendrá más que otros, pero limitar tus acciones a una sola vía de llegada al público es peligroso. Busca las combinaciones que más te interesen: medios de comunicación generalistas, prensa especializada, redes sociales, influencers, vídeo, foto, texto… Hay mil formas de hacerlo y todas pueden funcionar si sabes hablar su lenguaje y enfocarlo de la manera correcta.
La importancia de la escucha activa
Con cada paso que des estarás poniendo tu reputación en juego, y saber qué se dice ahí fuera sobre tu marca o empresa es fundamental para no ir a ciegas en el entorno digital. No puedes esperar a que el ruido llegue hasta ti: practicar la escucha activa, destinando tiempo y recursos, es básico para recopilar datos, medir cómo evoluciona nuestra reputación y, además de ver en qué punto nos encontramos a nivel de notoriedad, ser capaces de anticipar cualquier crisis que se acerque.
Estos son nuestros cinco mandamientos de comunicación corporativa para 2023, aunque podríamos dar muchos más. Pero, por encima de todos, hay una regla fundamental que se aplica desde el inicio de los tiempos, alcanza este 2023 y seguirá siendo básica por los siglos de los siglos: apuesta por expertos para gestionar tus acciones de comunicación.