El email marketing es una de las patas más importantes en cualquier estrategia de marketing digital. Más allá de los contenidos que generemos, de la forma en la que los dinamicemos en las redes sociales o de qué manera presentemos nuestros productos o servicios en la web, en el embudo de conversión de nuestra estrategia deben contemplarse distintas técnicas de mailing.
Definición de Email Marketing
Pero, ¿qué es el e-mail marketing? Estamos ante una palabra de procedencia anglosajona (e-mailing, emailing) que sirve para definir una técnica de marketing digital cuyo objetivo versa en el envío de correos electrónicos de forma masiva a los contactos existentes en una determinada base de datos.
¿Qué debemos hacer en nuestras campañas de e-mailing?
A través del email marketing podemos hacer comunicaciones segmentadas con nuestra base de datos. Si un usuario nos ha dado su dirección de correo electrónico significa que, al menos, lo que ofrecemos le suscita interés: aprovechémoslo. Con un buen mailing podemos desde presentar un nuevo producto o servicio hasta comunicar una oferta o campaña puntual, ofrecer condiciones que nos ayuden a fidelizar usuarios y conseguir, por qué no, ventas directas.
Para triunfar a través del correo electrónico, como en cualquier otro aspecto del marketing digital, debemos saber cómo. En ComunicAlicante hemos preparado un decálogo: los diez mandamientos estrella para que la estrategia funcione.
Consejos para triunfar en tus campañas de emailing
Si ya tenemos una base de datos con cierto volumen, podemos empezar a plantearnos hacerles llegar contenidos. Pero teniendo en cuenta las siguientes variables.
- Ofrece algo. Siempre. Da igual que sea una oferta de un producto o servicio, contenidos de interés para los usuarios o algún recordatorio, pero siempre debemos tener un motivo para el envío. El email marketing es de gran utilidad, pero enviar un mailing sin tener nada que contar u ofrecer lo único que conseguirá es que algún usuario se dé de baja.
- No seas pesado. Aunque creas que siempre hay algo que contar, la empatía es clave a la hora de enviar un mailing: ¿Realmente es necesario un Newsletter para esto? ¿Es tan importante como para que los usuarios se preocupen de abrir el correo y leerlo? Si abusamos de la amabilidad de los usuarios que nos han facilitado su contacto y enviamos mailings prácticamente como ‘spam’, los usuarios se hartarán rápidamente de nosotros y la táctica se volverá en nuestra contra.
- Cuida la estética. Si vas a enviar un Newsletter de 500 palabras sin una sola imagen, quizá sea preferible no enviarlo. Un mailing, por norma, debe ser ligero, visual y atractivo. En formato HTML, de forma que podamos incluir botones de contacto, enlaces y demás contenido multimedia, pero siempre estructurado estéticamente y sin cargar en exceso.
- Horario. Para conseguir un mayor alcance con nuestro email marketing, hay que cuidar también el momento del envío. Por lo general, lo idóneo es enviarlo a media mañana, entre las 11 y las 12: a ese horario, la gente que consulta el correo en el trabajo ya ha conseguido liberarse de las tareas más urgentes de primera hora, y todavía no tiene prisa por cerrar las últimas de la mañana. Aunque, por supuesto, es una teoría: cada público se comporta de una manera, por lo que la mejor manera de saber cuándo puede funcionar mejor es siguiendo el ‘método Hawkers’: pruebas, ensayo-error constante, análisis de datos y extracción de conclusiones.
- Base de datos. Las bases de datos no son inmóviles ni eternas. Debemos pulirlas constantemente: eliminar aquellos correos que dejen de funcionar, pues enviarlo a correos inexistentes bajará nuestro ratio de apertura; ampliarla constantemente, captando nuevos contactos; y segmentando por husos horarios o áreas geográficas, en función de los intereses concretos de cada envío.
- Calendariza tus envíos. Está bien tener cintura para hacer envíos puntuales o salir al paso de incidencias con alguna comunicación por correo electrónico, pero lo ideal es agendar los envíos y ceñirse a ello. Establecer una periodicidad, aglutinar el material en cada pieza de mailing y que el usuario lo esté esperando antes de que llegue.
- Sé responsive. Cada vez más usuarios centralizan su consumo de internet y contenidos en el teléfono móvil. Si ya adaptamos nuestras páginas web, contenidos y presentaciones a las pantallas de los smartphones, con el email marketing debemos hacer lo mismo. El correo electrónico va en el bolsillo de los usuarios, por lo que nuestras Newsletter deben estar listas para convivir con cualquier formato.
- Haz un envío de prueba. La tecnología es en ocasiones caprichosa, y lo que en nuestro software de edición parece una maravilla, puede descuajeringarse una vez enviado. Antes de lanzar nuestra recién creada pieza de email marketing a toda la base de datos, conviene hacer una prueba. Un envío a alguien de la oficina, o a nuestra cuenta de correo paralela, nos puede salvar de un error masivo. Y, una vez comprobemos que todo funciona correctamente, lo difundimos.
- Analiza los datos. Cada envío que hagamos lleva unida una gran cantidad de información. El horario, el tono de la comunicación, los colores utilizados, el tipo de imagen… Analicemos minuciosamente cada detalle y tratemos de extraer conclusiones: ¿Por qué el Newsletter de esta semana se ha abierto menos que el de la semana pasada? ¿Qué tuvo el último envío para ser el que mayor conversión logró? Una buena toma de decisiones requiere de la mayor información posible.
- Incluye siempre un CTA. El email marketing es fantástico como elemento de comunicación, pero de poco nos servirá si no nos consigue ni un solo lead. Para ello, es vital que tras todo aquello que contemos, mostremos y presentemos en nuestro Newsletter, haya siempre una llamada a la acción. Un botón que redirija a nuestra web, a una llamada telefónica directa o a la oferta concreta, y cuyos clics podamos monitorizar, es básico para conseguir el objetivo. Pongámoslo fácil al usuario.
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