El game experience está de moda. La digitalización lo alcanza todo: desde la forma de comunicarnos, informarnos o trabajar hasta, por supuesto, la de divertirnos y aprovechar nuestro ocio. Las nuevas generaciones, por tópico que resulte, se han criado con la vista puesta en una pantalla, en la que pueden encontrar tanto entretenimiento como en el mundo analógico. Y en esa tendencia se han fijado ya algunas empresas, como la cadena hotelera alicantina Magic Costa Blanca.
Esta cadena de establecimientos hoteleros ubicada en el litoral alicantino ha detectado un patrón: las familias, especialmente los niños, buscan sus lugares comunes aun en sus vacaciones. Y no se trata de darles videojuegos para que se pierdan lo que hay ahí fuera, sino de encontrar un equilibrio y dar un complemento para que puedan divertirse como están acostumbrados a hacerlo durante el año en un entorno al que también pueden sacar mucho jugo durante todo el día.
Pero el game experience va mucho más allá de poner una zona con pantallas de plasma y consolas para mantener a los niños entretenidos. Es, como su propio nombre indica, una experiencia: se trata de tematizar un hotel al completo para que la diversión de la familia sea la máxima a perseguir, no para tener un hotel divertido, sino para que las vacaciones se vivan dentro de la diversión.
Y esa máxima, que cada vez ayuda más a convencer a las familias para desplazarse y aprovechar sus vacaciones al máximo, se aplica especialmente en dos establecimientos de la cadena Magic Costa Blanca: el Robin Hood y el Magic Tropical Splash. Estos dos alojamientos situados en el litoral alicantino han convertido al game experience en uno de sus principales atractivos.
El segundo de ellos, el Magic Tropical Splash, cuenta con trescientos metros cuadrados en los que quienes allí se hospeden pueden disfrutar de los videojuegos más exitosos y actuales, la realidad virtual en su máxima expresión y la diversión en familia. Desde los multijugadores más divertidos hasta simuladores de velocidad con sus propios volantes y asientos, el game experience ayuda a disfrutar de unas vacaciones más completas y entretenidas, más allá de los siempre apetecibles y presentes planes de playa, piscina o gastronomía.
Pero como no todo son videojuegos, este resort de aires caribeños también cuenta con su propio parque acuático interior, en el que niños (y no tan niños) se divierten deslizándose por sus toboganes, nadando en sus piscinas o, simplemente, relajándose en una tumbona junto a la piscina.
Game experience en la Edad Media: el Magic Robin Hood
Uno de los últimos establecimientos que ha abierto la cadena Magic es el Robin Hood. En este resort, que mezcla su carácter medieval, deportivo y acuático con la tematización que le da nombre, el game experience vuelve a hacerse presente en cada centímetro cuadrado de complejo
Al igual que el Magic Tropical Splash, el Magic Robin Hood cuenta con un parque acuático propio que deja la diversión en casa. No es necesario abandonar el resort para encontrar el entretenimiento: está nada más abrir la puerta de la habitación. Piscinas, toboganes de muchos tipos diferentes, bares inspirados en las leyendas de Robin Hood, restaurantes tematizados como en la Edad Media e incluso espectáculos en directo para disfrutar hasta el último segundo.
Además, en este complejo el game experience va más allá de algunas ofertas o servicios: lo empapa todo. Las familias pueden alojarse en el Bosque de Sherwood, en el poblado de Nothingham o en los jardines del mismísimo Robin Hood, en cabañas tematizadas para que la experiencia y la diversión sean la tónica de una estancia allí, más que lo que se hace en los ratos libres.
Y, por si fuera poco, el resort tiene (aparte de su propio parque acuático) un parque multiaventura en el que trepar, saltar y escalar a través de las distintas estructuras como si Indiana Jones fuese un huésped más.
Más allá del game experience: Magic Costa Blanca en los medios
Los hoteles Magic Costa Blanca, además de enamorar a miles de familias que cada año buscan lo mejor de la alicantina y la valenciana, han sabido adaptarse a las situaciones potencialmente incómodas para quienes se alojen con ellos. Una de ellas es, sin duda, la gran cantidad de gente que va y viene durante las vacaciones en agosto, que si no se gestiona con precisión y mano izquierda puede derivar en agobios y preocupaciones: lo último que se busca al estar de vacaciones.
Por eso mismo, y para evitar aglomeraciones en los aledaños de sus piscinas de personas que buscan tumbonas libres o las ocupan abusivamente durante horas sin estar presentes, Magic Costa Blanca decidió crear la figura del “gestor de espacios”: una persona del staff del hotel se encarga de velar por que cada huésped pueda relajarse, por que no haya tumbonas desaprovechadas ni nadie haga mal uso de las instalaciones comunes.
Esta iniciativa, unida a vídeos como este en el que se ve a cientos de personas que, en plenas vacaciones, se levantan a las 7 de la mañana para no quedarse sin hueco, ha llevado a Magic Costa Blanca a los medios de comunicación: una figura aparentemente sencilla pero que hasta la fecha se había echado de menos en muchos lugares, y que en el litoral alicantino vela por el bienestar de los veraneantes.
Así, gestores de espacios y game experience se unen para que las vacaciones en la Costa Blanca sean aquello para lo que se concibieron: un necesario tiempo de asueto y relajación, a ser posible en un entorno tan propicio e ideal para la causa como el litoral alicantino.